Hacer frente a un vuelo no es tarea fácil, y mucho menos cuando tu vida está enfocada a no bajar de él. Es cierto que es un estilo de vida apasionante y lleno de aventuras pero también entraña riesgos para la salud.
Según informan desde los CAP, vamos a daros una serie de tips para ayudar a todos aquellos asistentes de vuelo o futuros asistentes de vuelo o pasajeros, para mantenerse en forma cada día de travesía. ¡Bon voyage!
1 Desinfecta todas las superficies del avión
La higiene es muy importante, y mucho más cuando estamos hablando de un transporte público en el que miles y miles de pasajeros se sientan cada día. Para ello, una recomendación muy efectiva es tener a mano toallitas húmedas pequeñas, así como desinfectante, de esta forma evitaras posibles contagios.
Además no te olvides de los dos años de pandemia, las mascarillas han venido para quedarse, esta será otra forma de prevenir posibles infecciones bacterianas, no solo las provocadas por el Covid-19.
2 No dejes la comida en las bandejas
Normalmente, todo tripulante utiliza las bandejas traseras de los asientos para depositar sus objetos personales de forma que le aporte confortabilidad; el móvil para ver una película, el ordenador… y aunque estas bandejas suelen quedar limpias y desinfectadas por los personales de vuelo tras cada viaje, no es recomendable utilizarlas a la hora de comer o para dejar comidas sobre ellas, ya que podrían no estar totalmente desinfectadas, siendo así un foco de infecciones.
Si el personal de vuelo no lo hace, tú tampoco deberías.
3 Descansa durante el vuelo
¿Tienes un vieje largo y no quieres sufrir jet lag? Es súper importante que en viajes donde vayas a cambiar de zona horaria te tomes unas horas de sueño, ya que de esta forma evitaras que tu reloj corporal interno se desajuste, provocando fatiga y cansancio general.
Mantener un descanso correcto es parte de la función básica del cuerpo humano, por ello te recomendamos que durante los vuelos intentes tomar pequeñas siestas, nunca antes de despegar o durante el aterrizaje, ya que en esos momentos los cambios de presión serán más bruscos y podrán causarte daños auditivos.
4 Evita realizar ejercicio después de un vuelo
Cuando llegamos de un viaje no es habitual ir directamente al gym, pero si lo estás pensando, te recomendamos que no lo hagas.
Cuando viajamos nuestros cuerpos han de adaptarse a nuevas circunstancias como la deshidratación provocada por el bajo nivel de humedad, dolores de cabeza o de oídos provocados por los cambios de presión, fatiga o dolores de piernas provocados por el tiempo que pasamos sentados. Con lo que podemos deducir que nuestro cuerpo no está preparado para asumir grandes esfuerzos físicos, debemos darle un tiempo de adaptación a nuestro cuerpo para que este se ajuste al aterrizaje, además de no olvidarte de hidratarte, es imprescindible.
5 Mantente hidratado
Como ya veníamos diciendo anteriormente es necesario mantener una buena hidratación durante los viajes, pongamos un ejemplo; tomamos un vuelo de 3 horas, nuestro cuerpo llegará a perder un litro y medio de líquidos, lo que nos provocara tener más sed, labios y mucosas más secas, aumenta la fatiga y puedes llegar incluso a marearte.
Entonces, ¿cuál es la solución? ¡Bebe agua! y evita las bebidas con cafeína, pues bebidas como el café harán el efecto contrario, además de aumentar tu estrés, evita también comidas con sal o la ropa ajustada, favorecerán la deshidratación así como otros puntos ya comentados. ¡Ahora ya estas preparado para empezar tu viaje, solo te queda disfrutar!